HONOLULU.- Reguladores federales proponen prohibir nadar con delfines en Hawaii, una medida que podría poner en riesgo una de las actividades turísticas más populares del estado y a la industria que se ha desarrollado a su alrededor.
El Servicio Nacional de Pesca Marina dijo que a los delfines acróbatas de hocico largo -una juguetona especie nocturna con la que los humanos interactúan habitualmente en Hawaii- se les priva de su descanso durante el día, lo que los estresa.
Nadar con delfines es una actividad popular entre visitantes y algunos residentes locales, con decenas de empresas en Kauai, Oahu, Maui y la Gran Isla realizando visitas a delfines a diario.
La proposición de ley podría cerrar o afectar de manera importante al funcionamiento actual de la industria, porque el veto cubriría aguas a una distancia de hasta 2 millas náuticas, donde descansa el 98% de los también conocidos como delfines giradores de Hawaii después de pasar la noche alimentándose. Las compañías turísticas llevan a sus clientes a esas zonas próximas a la costa para encontrar delfines.
Debe existir un punto intermedio entre lo que necesitan los operadores de este tipo de actividades y la propuesta de los reguladores federales, dijo Richard Holland, director general de Dolphins and You, una empresa que transporta a diario a unos 80 clientes para visitar delfines en la costa de Waianae, en Oahu. Comentarios de clientes sobre su negocio publicados en medios sociales y otros sitios en internet suelen mencionan como cambió su vida tras la visita, señaló.
«Si se está realizando un trabajo que ayuda a la gente, que la ilumina, que la inspira, que la hace sentir bien, es una cosa buena. No hay necesidad de quitar eso», enfatizó Holland.
Ann Garrett, administradora regional asistente de la división de protección de recursos para las Islas del Pacífico del Servicio Nacional de Pesca Marina, dijo que se ha descubierto que los delfines están quemando calorías a una tasa más alta de la habitual, porque se ven obligados a estar vigilantes cuando la gente se aproxima a sus grupos.
Científicos no han realizado ningún estudio sobre cómo los juegos con humanos ha afectado a la población de delfines, pero temen que el estrés dañe la capacidad reproductora del animal.
