Insólito es la palabra que describe el amorío que brotó entre hijastra y madrastras, pues la joven fue capaz de conquistar a la amada de su padre, al grado de contraer nupcias con su enamorada.
La historia ocurrió en Rosario, Argentina, y aunque en principio se les prohibió a las mujeres contraer nupcias -es ilegal el matrimonio entre personas con vínculos de sangre o familiares-, después de demandar, las enamoradas lograron su objetivo.
Según medios locales, este extraño amorío surgió cuando la hija mayor del hombre se fue a vivir con él y su pareja; de inmediato hubo química entre hijastra y madrastra.
Aunque estaban enamoradas, fue hasta 2010 cuando el padre de la joven murió, que las mujeres decidieron estar juntas sin ningún tipo de impedimento.
Los nombres de las protagonistas de esta historia se mantienen en reserva. Pero ahora que no enfrentan obstáculos legales, sólo falta que las jóvenes, de 33 y 32 años, ponga fecha para la boda.
