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Pacto Histórico: La invitación de Leonel ante conflictos por la JCE

Pacto Histórico: La invitación de Leonel ante conflictos por la JCE
Pacto Histórico: La invitación de Leonel ante conflictos por la JCE

Santo Domingo, RD.- Cada pacto firmado en República Dominicana es una evidencia de que de las grandes crisis pueden germinar grandes soluciones, siempre y cuando se apueste al diálogo y haya un interés por parte de los sectores involucrados en resolverlas.

Por años, a través del Diálogo Nacional se han producido importantes reformas que van desde lo laboral y económico hasta lo político-electoral.

En la actualidad,  en medio de la crisis sanitaria, económica y social creada por la pandemia de la covid-19, el presidente Luis Abinader ha convocado al diálogo nacional con doce temas en agenda.

Con estos diálogos busca impactar áreas como la seguridad social, sector eléctrico, transporte, educación, hidrocarburos, sistema de justicia y el sistema fiscal del país, entre otros.

Sin embargo, en las últimas tres décadas y “un chin más” varias veces se ha buscado la concertación entre los sectores de la sociedad.

Pacto 1999

Así ocurrió en 1998 ante la crisis que surgió en el en torno a la Junta Central Electoral (JCE).

Aconteció en agosto de 1998,  cuando tras las elecciones congresionales y municipales, el Senado de la República era dominado por el Partido Revolucionario Dominicano (PRD).

Tenía 29 de 30 senadurías.

En esa ocasión Ramón Alburquerque, representante por Monte Plata, ocupó la presidencia del Senado.

Entonces, sin consenso previo se designó  una nueva JCE que tendría a cargo organizar las elecciones del año 2000.

Morel Cerda

Manuel Ramón Morel Cerda seria el nuevo presidente, y los miembros:

  • Salvador Ramos,
  • Ana Teresa Pérez,
  • Luis Arias y
  • Luis Ramón Cordero.

Las críticas de la oposición estaban dirigidas, precisamente, a Morel Cerda por su vinculación al PRD.

La decisión del Senado fue objetada por el Partido Reformista Social Cristiano (PRSC) y Partido de la Liberación Dominicana (PLD).

Según reseña  monseñor Agripino Núñez Collado en el libro “Veinticinco años de experiencia de diálogo y concertación en la República Dominicana”, de su autoría, durante varios meses se realizaron reuniones y encuentros infructuosos con la participación de los partidos políticos en procura de una solución.

Invitación al dialogo

Hasta que, el 27 de febrero de 1999, en su discurso de rendición de cuentas, el presidente de la República, en ese entonces, Leonel Fernández Reyna, propuso a los tres partidos políticos mayoritarios, PRD, PRSC y PLD, la firma de un “Pacto Histórico” que conllevaría a una Reforma Constitucional, la variación del sistema de elecciones de los miembros de la Cámara de Cuentas y de la Junta Central Electoral.

La propuesta de Fernández fue aceptada y, efectivamente, el miércoles tres de marzo, los representantes de los partidos políticos acudieron al Palacio Nacional.

En este primer encuentro de diálogo en el Palacio Nacional, al preparar la agenda, se colocó como punto número uno lo concerniente a los integrantes de la Junta Central Electoral.

El debate duró hasta mayo del 1999.

Negativa tras dialogo

Sin embargo, meses después el PRD se negaba a firmar.

Acción que, según publicó el periódico La Nación (el 20 de julio 1999), fue considerada por miembros del Comité Político del PLD como una amenaza a la estabilidad política del país.

Luego de un prolongado intercambio, los dialogantes convinieron en llevar de cinco a siete el número de jueces para que el PLD y el PRSC estuvieran representados en el organismo electoral.

Así lo explica Núñez Collado en uno de los párrafos de su libro.

Revela además que, el PRSC sugirió al doctor Julio Cesar Castaños Guzmán y el PLD, al licenciado Roberto Leonel Rodríguez Estrella, para que fueran presentados al Senado de la República.

Los dialogantes también acordaron formar una Comisión de Seguimiento.

Los integrantes, por consenso, fueron:

  • Dr. José Joaquín Puello,
  • Dr. José Miguel Bonetti G.,
  • Reverendo Manuel Estrella, y
  • Monseñor Agripino Núñez Collado.

Autor: Rosa Reyes

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