Se quejan de que la fiscal de Puerto Plata los asedia
Las irregularidades en la fiscalía de Puerto Plata no solo se limitan a lo ocurrido en el allanamiento en La Mulata III. Los fiscales también se quejan de que la titular los asedia. Dos de los fiscales que fueron llevados al allanamiento, realizado en el proyecto habitacional La Mulata III en el municipio Sosúa, en Puerto Plata, donde murió un alemán y se sustrajeron RD$60 millones, denunciaron que fueron excluidos de la investigación y que la fiscal titular de Puerto Plata, Alba Núñez, los llamó para que ayudaran a la Policía en la operación cuando es la Fiscalía que debe tener el control de los agentes.
En un informe que los magistrados José Martínez y Juan Carlos Hernández enviaron a la Inspectoría General del Ministerio Público relatan que 15 días previos al allanamiento, Núñez se reunió al menos en tres ocasiones con el capitán Gerson Acosta y varios alemanes, quienes supuestamente fueron los que dieron la información a la Fiscalía, y que en estos encuentros ellos no participaron.
El pasado 12 de este mes elCaribe publicó que la fiscal de Puerto Plata confió el caso al capitán Acosta, quien tenía la orden de allanamiento.
Los magistrados se quejan, además, de que nunca se confió en ellos, nunca se les informó sobre la investigación y el peligro que corrían. “Nunca se planificó ni se coordinó nada al respecto, pero peor es que en medio del problema, la magistrada llegó al lugar y pudo ver la situación que se había suscitado y permitió el caos”, detallaron.
Se enteraron el mismo día
El documento reseña: “Solo el mismo día 17 de octubre a las 7:30 a.m. recibimos una llamada por separado de la magistrada pidiéndonos que fuéramos a ayudar a los policías en unos allanamientos. No sabíamos adónde íbamos, las órdenes de allanamiento las tenía en su poder el capitán Acosta… nunca tuvimos en la dirección funcional de la investigación, ya que eso fue puesto en manos de la policía”.
Agregaron que cuando llegaron al lugar no pudieron entrar porque las puertas eran electrónicas y se armó un tiroteo, que fue aprovechado por algunos policías para irrumpir en el lugar. Sin embargo, el capitán tenía un dispositivo que abría todas las puertas, explican.
Entienden que el informe enviado por la fiscal titular, donde dice que ellos actuaron con irresponsabilidad, ya que se les fue de las manos la actuación, no es justo y está errado porque jamás tuvieron en sus manos la dirección funcional del caso. Dijeron que cuando llegaron a la escena del crimen, ya estaba arrabalizada e inundada por policías.
Revelaron que todas las órdenes estaban a nombre de la titular de Puerto Plata y que ella y el capitán Acosta fueron quienes llevaron la investigación. “Se les fue el caso de las manos y están buscando culpables y quieren que nosotros paguemos los platos rotos que otros rompieron con todo y vajillas”.
Los fiscales terminan diciendo que están prestos para demostrar lo que denuncian.
Fiscal creía que todos eran corruptos
Dos comunicaciones más enviadas a las autoridades de la Procuraduría y firmadas por ocho fiscales de esa jurisdicción dan cuenta de que desde su designación como titular de Puerto Plata, Núñez mantiene a los fiscales en constante asedio, que los investigan y graban todas sus conversaciones, por lo que viven una situación de desasosiego e intranquilidad que los puede llevar a la inactividad. Agrega el documento que Núñez filtra a la prensa los informes antes de que los mismos fiscales lo sepan. Martínez y Hernández también solicitan que se investigue a Núñez.
