Un grupo de profesores-investigadores del INTEC realizó un interesante estudio sobre el impacto del sector informal en la economía dominicana.
Fabricio Gómez Mazara, Oliver Cruz y Enmanuel Silvestre indican en su análisis que entre el año 2000 y 2013 el empleo en el sector informal creció en un 41.5%. Mientras, el empleo formal apenas lo hizo en un 19.8%. Por eso en la actualidad de cada 100 personas empleadas 56 trabajan en el sector informal. Y si se excluye al sector público se tiene como resultado que da cada 100 personas empleadas en el sector privado 65 trabajan en la informalidad.
Los resultados del INTEC confirman las conclusiones de un estudio previo del Fondo Monetario Internacional sobre los determinantes de la informalidad en América Latina y el Caribe.
A mayores impuestos mayor propensión a la informalidad. Las pequeñas empresas no soportan impuestos como el 1% sobre los activos o el adelanto del ITBIS no cobrado.
La rigidez laboral también influye sobre la informalidad. Muchas empresas informales pagan salarios por debajo del mínimo, no cumplen con la cesantía y no registran a sus empleados en la seguridad social.
La presencia de una mano de obra excedente no educada, ampliada por una creciente oferta laboral inmigrante, las ventas reducidas, la pobreza y la marginalidad son otros determinantes de la informalidad.
Por último, las actividades que demandan mano de obra de forma transitoria, como en la agricultura y la construcción, estimulan las relaciones laborales informales, aun cuando el negocio no sea necesariamente pequeño.
