La Comisión Europea (CE) propuso hoy cambios en la legislación europea contra la financiación del terrorismo, lo que permitirá el embargo preventivo de los bienes de los sospechosos, y planteó reforzar el Sistema de Información Schengen, utilizado en los controles de las fronteras exteriores.
Los comisarios europeos de Inmigración, Dimitris Avramópulos, Seguridad, Julian King, y de Justicia, Vera Jourová, presentaron en rueda de prensa las principales novedades planteadas, que se enmarcan en el objetivo de mejorar la legislación antiterrorista tras los ataques del último año en París, Bruselas, Niza o Berlín.
Para combatir la financiación del terrorismo, Bruselas quiere reforzar las normas sobre blanqueo de dinero y permitir el embargo preventivo y el decomiso de activos de los presuntos terroristas, algo que en estos momentos no se puede hacer, explicó en rueda de prensa la comisaria Jourová.
Si se aprueba la propuesta, aumentarán los controles sobre las personas que entren o salgan de la UE con más de 10.000 euros en efectivo y se permitirá a las autoridades actuar incluso en caso de importes inferiores a esa cifra, cuando existan sospechas de actividades delictivas.
Mejorará asimismo el intercambio de información entre autoridades y Estados miembros para controlar los grandes flujos de dinero en efectivo.
La comisaria incidió en que la rapidez es fundamental para impedir a los terroristas hacer uso del dinero, por lo que se acelerará la aplicación de órdenes de embargo preventivo o decomiso y se incluirán plazos más breves en el caso de las resoluciones de embargo preventivo.
Por otra parte, Bruselas propuso reforzar la eficacia del Sistema de Información Schengen (SIS), la base de datos más utilizada en la gestión de las fronteras en la Unión Europea.
Las lagunas en el intercambio de información entre los Estados de la UE impidieron actuar contra algunos de los terroristas responsables de los atentados de Bruselas o París, por ejemplo en el caso de Ibrahim El Bakraoui, uno de los kamikazes del aeropuerto de Bruselas, que fue expulsado por Turquía a Holanda, algo de lo que se informó a La Haya y a Bruselas.
Sin embargo el terrorista no estaba registrado por las autoridades holandesas ni en ningún listado internacional, por lo que pudo pasar de Holanda a Bélgica sin ser detectado.
Avramópulos destacó en rueda de prensa los avances en el último año contra el terrorismo e hizo hincapié en la importancia de una mejor gestión de las fronteras externas para crear una «Unión de la seguridad efectiva».
«En el futuro no se perderá nunca ningún dato relativo a potenciales terroristas sospechosos o a inmigrantes irregulares en nuestras fronteras exteriores», aseguró el comisario.
Para mejorar el intercambio de información y la cooperación, se introduce una nueva categoría de descripción sobre «personas buscadas desconocidas» y se dan plenos derechos de acceso a Europol.
Además, se obligará a crear una «descripción SIS» en los casos relacionados con delitos de terrorismo y se hará un uso más eficaz de datos como imágenes faciales e impresiones de las palmas de las manos para identificar a las personas que entren en el espacio Schengen.
También se introducirá una nueva descripción para las decisiones de retorno con el fin de facilitar la ejecución de esas decisiones.
El Sistema de Información de Schengen se nutre de los datos que aportan las autoridades nacionales y es consultado por guardias de fronteras, policía, autoridades de aduanas, responsables de expedición de visados y autoridades judiciales en el espacio Schengen.
Dentro de este sistema se incluyen datos sobre las personas que hayan cometido infracciones penales graves o que puedan no tener derecho de entrada o de estancia en la UE, así como alertas sobre personas desaparecidas, bienes robados o que hayan sido ocultados fraudulentamente como billetes de banco, vehículos, armas de fuego y documentos de identidad.
