Un avión comercial con 21 personas a bordo se estrelló poco después del despegue este martes en el condado de Waller, en las inmediaciones de Houston, la principal ciudad de Texas.
Todas las personas que iban en la nave sobrevivieron al accidente y solo una tuvo que ser ingresada en el hospital por daños en la espalda, aseguró el shérif del condado, Troy Guidry.
El aparato, un McDonnell Douglas MD-87, se estrelló poco después de intentar el despegue desde un aeropuerto cercano, el Houston Excecutive Airport, especializado en vuelos privados y corporativos.
La nave no fue capaz de tomar altura y acabó cayendo en una zona llana de campos de cultivo.
El avión rompió una valla en el accidente y prendió en llamas.
Las cámaras de televisión de canales de noticias de Texas captaban los equipos de bomberos tratando de contener el fuego, que echaba un humo que se veía en muchos kilómetros a la redonda y que calcinó buena parte del fuselaje.
La única parte del avión que pareció no resultar dañada por el fuego era la cola.
Todas las personas en el avión -18 pasajeros y 3 miembros de la tripulación- lograron salir de la nave y ponerse a salvo.
En el accidente, el avión también tumbó una línea de alta tensión, lo que dejó a unos 1.800 vecinos sin electricidad durante unas horas.
El avión destrozado está registrado bajo el nombre de J. Alan Kent, propietario de Flair Builders, una constructora con sede en Houston.
Tanto la Administración Federal de Aviación como el Consejo Nacional de Seguridad en el Transporte están investigando el incidente.
Avión se dirigía a Boston
Según imágenes aéreas del lugar del siniestro mostradas por televisiones locales, el avión chárter quedo completamente destruido tras caer al suelo.
Fuentes aseguran que el avión se dirigía a Boston para asistir a los partidos de la Serie del Campeonato de la Liga Americana.
Fuente: ABC
