PRAGA.- El árbitro de la liga checa, Marek Piln?, que ejercía este miércoles de cuarto árbitro en un partido de la liga checa, fue expulsado en medio del partido por su estado de embriaguez durante la contienda. Los espectadores dejaron de prestarle atención a los jugadores del Pribram y el Slavia Praha para fijarse en el involuntario baile del árbitro en la banda mientras le gritaban, cada vez que se tropezaba, palabras como «vergüenza» y «deshonor», según sostiene el diario deportivo checho iSport TV.
La escena duró hasta que a los 20 minutos de empezar el partido un guardia de seguridad lo arrastró hasta uno de los banquillos, donde lo sentó. «Si estaba borracho, no debería estar trabajando», afirmó el entrenador del Slavia Praha, que añadió que no comentaría nada más al no estar seguro de que su conducta se debía a un exceso con el alcohol. Pero no todos fueron tan prudentes: «El fútbol checo se acaba de meter un gol en propia meta», escribió en Twitter David Holoubek, entrenador del AC Sparta Praha U19.
Dos árbitros en la liga checa de fútbol fueron inhabilitados indefinidamente después que uno parecía estar borracho en la banda y otro fue visto orinando durante el partido.
El fallo del jueves del comité de arbitraje de la federación nacional fue un día después de los incidentes, que ocurrieron durante un partido entre Pribram y Slavia de Praga que fue transmitido en directo.
El comportamiento de Marek Pilny como cuarto árbitro llamó la atención desde el principio. Pilny estaba trastabillando en la banda y en un momento incluso se cayó, lo que provocó que el comentarista de televisión dijese que el árbitro era más entretenido que los jugadores.
Pilny fue sacado de la cancha durante el entretiempo.
Detrás de un arco, el árbitro Jiri Jech fue visto orinando durante el mismo encuentro.
