En los últimos 20 años son varios los casos de droga que se han identificado
Desde los inicios de la década de los 90, la República Dominicana ha sido utilizada como base de importantes cárteles de la droga que operan desde Colombia y México, y en esta época una de las provincias más mencionadas con relación al narcotráfico ha sido Peravia.
Ubicada al sur del territorio nacional, la provincia Peravia es considerada por algunos como una «zona franca» del narcotráfico. Y es que en los últimos 20 años son varios los casos de droga que se han identificado en este lugar.
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El más reciente fue la muerte a tiros del coronel de la Policía, Daniel Ramos, en un punto de drogas en Baní mientras realizaba supuestas labores de inteligencia.
Otro caso reciente ocurrió en julio pasado, cuando dos hombres murieron a tiros, también en un presunto punto de venta de drogas.
Las víctimas fueron identificadas como Ronny Martínez Cabrera, de 25 años, y Juan Gerónimo Pujols, de 47, por cuyas muertes se acusó a un hombre identificado como Jorge Luis Lara Tejada, alias Bambán, quien posteriormente se entregó a las autoridades.
En febrero de 2018, el juzgado de Atención Permanente de Peravia dictó 18 meses de prisión preventiva en contra de un hombre acusado de traficar con más de mil kilos de cocaína que fueron introducidos al país en el año 2016 por las costas banilejas de Matanzas.
De acuerdo con el informe de la Dirección Nacional de Control de Drogas, Muñoz Pereyra sería miembro de una red internacional de narcotráfico y supuestamente lavaba el dinero a través de bancas de lotería.
En otro caso en Baní, a finales de 2013 el agente Lorenzo Ubrí Montero murió de dos balazos en el pecho cuando junto a un equipo de la DNCD realizaba un operativo antidroga en el barrio Pueblo Nuevo.
Los agresores serían los hermanos Richard Estarlin y Franklin Alexander Aguasvivas.
El lanzamiento de la droga vía avionetas ha sido uno de los métodos utilizados por narcotraficantes en esta localidad. En el 2009 lanzaron desde una avioneta en la playa de Sabana Uvero un cargamento de cocaína, caso por el que varias personas resultaron detenidas.
Senador Wilton Guerrero
Una de las figuras que se han empoderado contra el narcotráfico en Peravia es el senador Wilton Guerrero, quien en reiteradas ocasiones se ha quejado de que en esta localidad las autoridades detienen y someten a los tribunales a “los hijos de Machepa”, mientras los verdaderos capos del narcotráfico quedan en la impunidad.
Uno de los casos de droga más recordados por la sociedad dominicana en esa provincia es el de Paya. En la “matanza de Paya” ocurrida el 4 de agosto de 2008, donde fueron ejecutados siete colombianos.
A través de esta se develó una organización de narcotraficantes en la que resultaron involucrados altos oficiales de la Marina de Guerra que tenían el control de los viajes ilegales hacia Puerto Rico, entre ellos el excapitán de fragata Ricardo Guzmán Pérez, el principal cabecilla de la organización.
Asimismo, Luis Soto Báez, considerado uno de los principales narcos de los años 90, fue detenido en Baní cuando trataba de transportar mil 116 kilos de cocaína a los Estados Unidos que habían entrado al país procedentes del Cartel de Cali, Colombia.
Solo en el municipio de Baní se habla de la existencia de más de 40 puntos de drogas, en los que se dice, agentes de la DNCD cobran dinero para dejarlos operar.
Y mientras el micro y el narcotráfico cobran fuerza en esta provincia, la queja de sus ciudadanos es que las autoridades no toman las medidas necesarias para enfrentar esta situación que pone en riesgo sus vidas por el aumento de los adictos y los enfrentamientos entre bandas.
Por Kirsis Díaz
